En la actualidad nadie niega que la práctica de ejercicio habitual es aconsejable para preservar y mejorar la salud. Además este hecho es aplicable tanto en personas sanas como en personas con algún tipo de trastorno o patología.
Esta semana sí que sí (siento la confusión de la semana pasada y la pseudo-publicación de este post, la tecnología a veces no es lo mío :)), quiero escribir y recomendaros un método de entrenamiento del cuál seguro que habéis oído hablar pero que igual desconocéis cómo actúa y en qué beneficia a nuestro cuerpo. Voy a hablar del Método Pilates, una disciplina que nos sirve tanto para entrenar el cuerpo como para rehabilitarlo.
En concreto, mi objetivo es que entendáis bien sus principios fundamentales de trabajo y los beneficios específicos que logramos al practicarlo en personas con trastornos del movimiento como la enfermedad de Parkinson, otros parkinsonismos, la distonía o la ataxia. Dicho de otra manera, quiero establecer una relación directa entre cada uno de estos principios y la sintomatología que puede mejorar en este tipo de enfermedades neurológicas.
PRINCIPIOS FUNDAMENTALES
1 Control Central o trabajo del Core: los ejercicios de Pilates nos enseñan a activar la musculatura profunda del abdomen y así conseguir la estabilidad necesaria para que el resto del cuerpo se mueva con fluidez
EL TRABAJO DEL ABDOMEN nos ayuda a MEJORAR EL EQUILIBRIO.
2 Respiración: el método Pilates nos educa a respirar de manera fluida y correcta, tratando de coordinar siempre el ejercicio con la respiración, evitando así apneas y tensiones innecesarias.
Conseguimos MEJORAR LA CAPACIDAD RESPIRATORIA y EVITAR PATRONES RESPIRATORIOS ERRÓNEOS.
3 Higiene Postural : en Pilates se trabaja de dentro a fuera, haciendo hincapié en la tonificación de los músculos que mejoran la postura y en el control sobre ellos.
Trabajar LA HIGIENE POSTURAL nos permite CONOCER MEJOR NUESTRO CUERPO Y MEJORAR, por ejemplo, LA POSTURA CIFÓTICA.
4 Precisión: los movimientos en Pilates requieren de concentración para ejecutarse. Son ejercicios coordinados que deben hacerse de manera precisa pero sin perder naturalidad y desenvoltura. Tratando de llevar la acción motora a los músculos que queremos trabajar y evitando malgastar la energía en contracciones musculares inútiles.
MEJORAMOS LA COORDINACIÓN Y LA ACTIVIDAD CEREBRAL.
5 Estiramiento – Tonificación: en Pilates se busca el equilibrio entre estos dos conceptos, para conseguir reforzar los músculos débiles y alargar los acortados.
Ayudamos a MEJORAR LA RIGIDEZ y evitar CONTRACTURAS.
Es por todo esto que si practicamos de manera constante y habitual esta metodología, finalmente conseguiremos interiorizar sus principios y aplicarlos en nuestras AVD (Actividades de la Vida Diaria)
Os animo pues a iniciaros en este deporte, que se puede hacer tanto en máquinas especializadas como en el suelo con una colchoneta. Eso si. con un profesional formado en la Metodología, preferiblemente fisioterapeuta, que os ayude y guie durante su práctica.
Firmado: Vanessa Rey.