Sobre la incapacidad laboral, el grado de discapacidad, el baremo de movilidad, la ley de dependencia y otras sorpresas de las enfermedades degenerativas.
Espero que la semana pasada os convenciese de lo importante que es preparar los papeles y los tribunales médicos que te va a tocar pasar si tienes una enfermedad neurológica degenerativa que limita tu capacidad para trabajar. Se trata de evitar sorpresas y conseguir lo que es justo, ni más ni menos. Aunque a veces el periplo administrativo es lento, se haga muy cuesta arriba y sientas que estás mendigando por tus derechos como decía Marta en su post sobre dejar de trabajar…
Hasta ahora, tu eras de los que apoyaba, ahora estás en el otro lado y tienes la suerte de poder recibir. Por fortuna vivimos en una sociedad que se precia de apoyar a los que lo necesitan y, aunque el sístema tenga muchos fallos, sí que se puede evitar la precariedad economica por enfermedad.
En fin, vamos con el segundo consejo. De los tres “exámenes” que tenéis que pasar preparad primero el de la Comunidad Autónoma, es decir: el grado de discapacidad y movilidad reducida pues si obtienes un grado alto de discapacidad, es un dato que los otros dos examinadores, tanto el de incapacidad laboral como el dependencia, van a tener muy en cuenta (viene en el manual).
Tenéis que jugar muy bien con los tiempos, para que tengáis los papeles que os interesen antes del siguiente “examen”. Os facilito, a modo de orientación, pues sé que varían en cada Comunidad Autónoma (especialmente la dependencia), los plazos que yo tuve:
- Solicitud de reconocimiento del grado de discapacidad y baremo de movilidad: tardaron 3 meses desde que lo solicité hasta que me llegó la carta con el fallo del tribunal. Puede ser incluso más rápido pues yo lo presente un día de San Fermín, por tanto estuvo en medio el mes de agosto que no suele ser muy activo. Son bastante ágiles y lo que tienes que estudiar viene aquí: https://www.boe.es/buscar/doc.php?id=BOE-A-2000-1546
Real Decreto 1971/1999, de 23 de diciembre, de procedimiento para el reconocimiento, declaración y calificación del grado de minusvalía. Tranquilo, parece imposible, pero se puede y se debe leer, ya sabes lo que anda en juego.
- Respecto de la incapacidad laboral, mi médico de familia presentó los papeles a primeros de noviembre, dos meses más tarde pasé el reconocimiento médico, y un mes más tarde tenía en casa los papeles. También 3 meses en total. También son ágiles. En este caso la documentación es más extensa, no hace falta leerse todo, vete directamente a tu enfermedad o enfermedades. Puedes encontrar la información aquí: http://gesdoc.isciii.es/gesdoccontroller?action=download&id=15/01/2016-440fa7054c
Guía de valoración de incapacidad laboral temporal para médicos de atención primaria (2ª edición). Hay también guías para el EVI (Equipo de Valoración de Incapacidades), muy impotante.
- Y ahora cambiamos de tercio: ley de dependencia, ¡armaos de paciencia! Un 10 de abril solicite el reconocimiento de la situación de dependencia y un 12 de julio (tres meses más tarde) pasé el examen en mi domicilio. Te evalúan en casa, el único examen de mi vida que he hecho en pantuflas, ¡toda una experiencia!. Al cabo de 2 años y dos meses me conceden la ayuda por dependencia, tras múltiples peticiones de papeles y desplazamientos.
Como habréis podido entrever, el tema no es sencillo, por eso os aconsejo que, en el caso de que no os veáis con fuerzas, acudáis a un buen profesional que se sabe los manuales y os puede guiar en tiempos, petición de informes, entrega de papeles, cumplimentación de formularios etc.
Otro día hablaremos de los intensos sentimientos que se viven en este periodo, en el que pasas del pavor a la alegría en cuestión de segundos.
Como veréis a continuación, esto que os he contado es muy antiguo: leed a Sun Tzu en “El Arte de la Guerra”, escrito en el Siglo IV A.C.. decía

“Si conoces a los demás y te conoces a ti mismo, ni en cien batallas correrás peligro; si no conoces a los demás, pero te conoces a ti mismo, perderás una batalla y ganarás otra; si no conoces a los demás ni te conoces a ti mismo, correrás peligro en cada batalla.”
Firmado: Javier Freundlich
Lola: Esa es la razón de nuestra existencia, ayudar a quien lo necesite, por tanto no tienes que darnos las gracias, el saber que estás bien, nos llena de alegría.
Un saludo
Javier Freundlich
Buenas tardes Javier, estoy en Motril,, pero solo vengo a ver a la doctora y a la asociación de Parkinson (que por cierto estoy encantada con la atención) pues estamos en un hostal y hasta que tenga una vivienda para empadronarme , no puedo hacer nada más,.He contratado a una Sra, para que me acompañe pues si no yo sola me es muy difícil. Cuando esté empadronada os escribiré de nuevo para que me recomendéis que tengo que hacer, Supongo que al ser la misma comunidad me servirá la valuación que me hicieron hace bastante tiempo. Muchísimas gracias por ayudarnos , no sé qué sería de nosotros sin vuestra ayuda
Un saludo
Lola
Buenos días Almudena:
Gracias por estar siempre al pie del cañón! Tienes mucha razón al afirmar que no basta con mencionar que padeces una enfermedad neurodegenerativa incurable, pues no es lo mismo si estás en una fase inicial que en una fase muy avanzada. Se evalúa el estado del paciente en ese momento.
Si el proceso avanza solicitas ser evaluado nuevamente y de acuerdo con las nuevas limitaciones modifican el grado de discapacidad o de dependencia o de incapacidad laboral que te habían asignado, así como la asignación económica.
Es decir no se evalúa la enfermedad en términos absolutos, sino como le está afectando en ese momento al solicitante, por lo que también es revisarle a medida que avanza la enfermedad.
Espero que haya quedado claro el matiz pues es crítico.
Un saludo
Javier Freundlich
Gracias Javier, ¡¡ Qué pena no haber tenido yo esta mínima base !!
Desde mi humilde experiencia en estos procesos y que adelante algo en el post “dejar de trabajar“, creo que existe actualmente, una actuación muy exhaustiva de valoración en algunas Comunidades Autónomas por parte de sus respectivas Administraciones provinciales que hace más imprescindible, para aquellos que presentamos solicitud para Incapacidad Laboral con una limitación progresiva, que los informes presentados de los especialistas ( neurólogos, psicólogos, psiquiatras, etc .), entren más en detalle en la incapacidad y limitaciones del paciente en ese momento y no se basen sólo en detallar la enfermedad como tal. En definitiva, no les vale sólo con detallar que tienes Parkinson avanzado (mi ejemplo).
Por otra parte, es razonable pensar que en media hora que dura la entrevista, ese médico evaluador (pueden no estar especializado en trastornos de movimientos y/o enfermedades neurodegenerativas), tenga bastante difícil hacerse una idea real de lo que en años han conocido los especialistas del paciente en cuestión.
En el caso de Párkinson, es una enfermedad muy particular y cada uno somos un mundo, como saben.
Saludos.
Gracias a ti Pilar por seguirnos. Te deseo lo mejor en este kafkiano proceso.
Un saludo
Javier Freundlich
En esas estamos, muchas gracias por compartir!!!!